Nos vamos a ROTH. Llegó el momento

Me hubiera gustado dedicar un poco más de tiempo a esta última entrada antes de ROTH, pero las prisas llegarán hasta el momento de comenzar la prueba.
Ha sido un año duro, muy duro. Creo que ha sido el año que más cosas he hecho y que más he aprovechado el tiempo. Ha sido un año dificil. Tengo perfectamente la imagen en la cabeza de cuando Raul, mi compi de fatiga en la distancia, me hablaba de hacer un Ironman y yo reculaba. Estuve dos o tres días pensando en solitario sobre esa bonita locura. Tenía miedo, pero quería intentarlo; dejar pasar el tiempo era seguir dejando espacio al miedo. Luego recuerdo también con claridad una cena con Susana, la Ironmanmi, donde le hablaba del tema y ella me decía, si si, para adelante, yo te apoyo en todas esas cosas. Pufff....era como el "si quiero".
Luego recuerdo el momento de la inscripción, nervios ya 7 meses antes, "corre...que nos quedamos sin plaza tío". ¡Qué locura!
En Enero comenzaron los entrenamientos, comienzos muy duros. Tendinitis en ambos tendones de aquiles. Me pasé hasta Marzo tratándome, fisio, infiltraciones... momentos de bajón, pues se acercaba la fecha.
Luego vino otro tren: La Federación me propuso impartir cursos, la parte de natación. "Hay que ver, todo este año", pero claro, no quería decir que no. Me resultaba una experiencia muy gratificante, aunque suponía trabajo de preparar clases y fines de semana pillados. Al final salió adelante y he dado dos cursos, uno de más de 20 horas como ponente y otro, hace poco, de 14 horas.
Y la casa¡¡¡¡¡ Madre mía. Mi susa me sorprendió con un anuncio en internet sobre intercambio de piso. Recuerdo que lo primero que la dije era que cómo nos íbamos a meter en esa historia preparando un Ironmán????. Nos metimos, numerosas reuniones con los dueños, visitas a bancos para negociar la hipoteca, notarios, altas-bajas de luz, agua, gas... cambio de domiciliaciones, etc, etc. Y mientras yo intentaba ir sumando todos los días. Unos días me levantaba a las 7 para entrenar antes de ir al INstituto, otros días me iba a nadar o al gimnasio a las 22.30 horas. AL final salimos, compramos una casa, vendimos un piso, nos mudamos y nos instalamos. Entre todo, un día acabé en urgencias, supuestamente por stress.
Mayo y Junio. NO queda nada. Nos sale un comprador para la plaza de garaje. Pecata minuta para todo lo que llevamos.
Y mientras más entrenos, más entrenos y más entrenos. Hicimos el medio ironman de Lisboa, los 101 de Ronda... Puedo decir bien alto y claro que he hecho todo lo que está en mis manos, he dado el 101% de mi. Para mi el éxito ya ha llegado. Estoy satisfecho, contento y orgulloso. No me puedo exigir más. Salga como salga, yo he hecho todos los deberes.
...Y Susana, mi gran niña y mi pequeño niño. Para ellos dedico todo este esfuerzo. Ellos son parte fundamental de este éxito. Nunca una mala cara, nunca un mal comentario para que no entrene, siempre animando y animando. Muchos días, en la solitaria bici, me imaginaba como entrábamos los tres en meta. Eso me hacía seguir y seguir.
Gracias a vosotros dos. Y gracias también a Josemi y al veterano castellano Agustín, por acompañarme en las salidas de carrera. Gracias al ironman Dani, que me ha aconsejado y acompañado en todas, absolutamente en todas las salidas que hacía con la bici de carretera.
Raul y Alex. Gracias por meterme el veneno del Ironman en el cuerpo, y gracias al segundo por animarme, con su estilo tan peculiar :).
Miguel, tu apoyo lo he sentido también con especial fuerza, tu interés me da ánimos. Gracias a todos.